Ya casi hemos terminado el tratamiento oncológico. Hoy, Quique, ha recibido su último ciclo de vimblastina. Ahora, nos queda esperar hasta primeros de marzo, momento en que le harán una nueva reevaluación. La resonancia magnética nos dirá si por fin concluimos la quimioterapia. Según la doctora, todo está yendo fenomenal y, lo más probable, es que finalice este tratamiento.
Su pierna parece completamente recuperada. Ya no se ve abultada. Camina perfectamente, corre, salta, trepa por los sillones, se sube a mesas y sillas... Un terremoto. Ojalá siga así mucho tiempo...
¡Cuánto me alegro! Es todo un campeón! No hay más que verle lo contento y lo sonriente que está.
ResponderEliminarTodo se puede vencer, por muy mal que se presente el camino, siempre hay un sendero por el que seguir. Yo ayer tuve un día de esos malos malísimos, en los que crees que no vas a poder seguir adelante, porque fuimos al médico y en lugar de facilitarnos las cosas, todo fueron problemas. Llegué a casa desesperada, y muy triste, pero aquí estoy hoy, otra vez con las pilas cargadas, intentando darte ánimos a tí también y pensando en un futuro mejor, que seguro que llegará. Muchos besos
Kike es todo un ejemplo a seguir de vitalidad y pasion por la vida. Un abrazo fuerte.
ResponderEliminar